Confia en el Señor Aunque No Entiendas

Eclesiastés 11:5

Eclesiastés 11:5 (RVR60)

Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

Proposición:

Es muy normal que durante nuestras vidas enfrentemos situaciones muy delicadas y difíciles. Nos encontraremos en momentos donde no entenderemos lo que sucede a nuestro alrededor o aún en nuestras propias vidas.

Es en estos momentos cuando, más que en ninguna otra ocasión, estamos llamados a confiar en el plan perfecto de nuestro Señor aún cuando no lo entendamos.

El es el Todopoderoso, Omnisciente, Omnipresente y Soberano Dios que Providencialmente conoce, sabe y entiende lo que es mejor para nuestras vidas, desde antes de la fundación del mundo.

Introducción:

Es una realidad que no podemos negar, lo que vemos a nuestro alrededor nos demuestra que cada día las cosas van deteriorando mas y mas. Estamos siendo testigos de acontecimientos que en realidad jamas podríamos comprender. Tantas muertes, enfermedades, catástrofes naturales, guerras; todo esto sacude nuestro ser y hasta nos hace preguntar, ¿Porque?

La realidad es que Jesús lo dijo de manera muy clara:

John 16:33 (RVR60)

Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

Habrá grandes aflicciones, dolores y sufrimiento.

Seremos perseguidos y señalados.

Pasaremos por tormentos y angustias, casi al punto de desfallecer… Pero El también dijo “Confía”, ya yo lo pase por ti y lo vencí en la cruz y la resurrección, ahora solo “Confía”

Simple, ¿verdad? ¿Pero, porque nos sucede en tantas ocasiones que no podemos confiar en el Señor y en Su plan, cuando El mismo nos lo esta diciendo?

Primero, no solo estos acontecimientos que vemos a nuestro alrededor nos llevan a dudar y a desfallecer… sino que también en nuestras vidas, en lo personal, vivimos momentos y situaciones tan difíciles en las que, incluso, cuestionamos a Dios:

¿Donde estas?

¿Porque dejas que esto me ocurra a mi?

¿Como permitiste que llegase a este momento tan duro de mi vida?

¿A caso esto es un castigo tuyo por algún pecado que he cometido?

Yo no entiendo el porque me toco vivir esto a mi… etc.

Segundo, nos hacemos estas preguntas porque no entendemos a cabalidad el plan perfecto de Dios para nuestras vidas. Dudamos y tememos porque nuestro enfoque esta en resolver las cosas a nuestra manera como si pudiésemos ayudar a Dios, o fuésemos mas que Dios.

Dudamos y no entendemos porque pensamos que nuestra manera de hacer las cosas es mejor que el plan de Dios para nuestras vidas.

Dudamos y no entendemos porque la respuesta no llega como la esperamos o en el tiempo que queremos.

Dudamos y no entendemos porque no conocemos realmente el Dios Todopoderoso, Creador de los cielos y la tierra Omnisciente y Providencial.

Dudamos y no entendemos porque en muchísimas ocasiones tenemos una débil relación con el Señor caracterizada por una gran falta de oración, estudio Bíblico y compañerismo entre hermanos.

Tercero, cuando nuestra relación con el Señor flaquea o tambalea, también lo hace nuestra confianza en El, y por consiguiente, jamas podríamos entender cual es el plan que El tiene para nuestras vidas. El Señor nos llama a relacionarnos con El, a confiar en El aunque no veamos...

El Señor en Su Palabra nos llama a caminar por Fe...

2 Corinthians 5:7 (RVR60)

(porque por fe andamos, no por vista);

- Si muchísimas veces no llegamos a entender las cosas simples de la vida, mucho menos entenderemos todo lo que Dios sabe y hace en nosotros y en nuestro entorno.

-Eje. Cuando nuestra relación con nuestros seres queridos y con el mundo es débil, no podemos apreciar las cosas simples de la vida.

- Así también, una relación débil con el Señor no nos permite confiar plenamente en El, y mucho menos comprender Su plan perfecto.

- “Entender a cabalidad la manera como obra Dios es querer tratar de poner junto todo el tiempo, pasado, presente y futuro;

- todas las actividades de cada uno de los seres humanos con sus pensamientos y decisiones;

- es considerar todas las opciones, sabiendo cuales van a tomar cada ser humano a través de cada segundo y minuto de sus vidas en estos ya mas de 6,000 años de existencia de la humanidad.”

Entonces hermanos, aun cuando no podamos entender a cabalidad cual es el plan perfecto de Dios para nuestras vidas

Aun cuando aparente no haber una luz al final del túnel

Aun cuando las adversidades sean tantas como las de Job

Aun cuando no puedas ver o percibir el porque suceden las cosas

Aun cuando el dolor te lleve a cuestionar a Dios

Tu y yo estamos llamados a Confiar en el Señor, aun cuando No Entendamos Su Persona, Su Plan, Sus Caminos o Sus Pensamientos.

Dice la Palabra:

Isaiah 55:8 (RVR60)

Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová.

Así, confiando y entendiendo que Sus caminos y Sus pensamientos son mejores que los nuestros, quisiera exponer la Palabra del Señor bajo el tema:

Tema: Confia en el Señor Aunque No Entiendas

Volvamos al texto base para este mensaje sobre el cual les quisiera presentar tres puntos de desarrollo y aplicación para nuestras vidas...

Eclesiastes 11:5 (RVR60)

Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

- El Desconocer Nos Lleva a Desfallecer

- En Su Poder Podremos Prevalecer

- Confiemos en El Aun Cuando No Logremos Entender

I- El Desconocer Nos Lleva a Desfallecer

Tanto para aquel que es no-creyente, así como para los que hemos sido “hechos hijos de Dios” (Juan 1:12), lo que es oculto, lo que no entendemos, lo que no podemos palpar o ver, todo lo que es desconocido nos lleva a sentir cierto temor, cierta incertidumbre que nos hace desfallecer y a veces, hasta caer.

A- El rey Salomón, o mejor conocido en este libro como el Predicador, nos muestra en este capitulo 11 unas grandes verdades sobre nuestra vida, en especial el verso 5, con grandes imágenes para apreciar y meditar.

De inmediato resaltan estas dos grandes imágenes… “no sabes cual es el camino del viento… como crecen los huesos en el vientre de la mujer en cinta” (Eclesiastes 11:5)

a. ¿Alguna vez ha tratado de imaginar cual es el “camino” del viento?

Claro, hoy día tenemos meteorólogos, científicos y tecnología que nos ayudan a calcular y hasta observar el movimiento del viento, su velocidad, temperatura, presión, etc.

Pero, en realidad, ¿podemos ver el “camino” exacto por donde el viento pasa o porque se mueve en esa dirección?

¿Podríamos ver a simple vista la ruta exacta del viento, hacia donde se dirige y cuando se detiene?

Nosotros mismos, en muchísimas ocasiones, perdemos el camino o el rumbo hacia donde nos dirigimos.

Divagamos y nos movemos como “zombies” porque desconocemos los caminos y nuestros pensamientos nos traicionan.

Ciertamente, el camino exacto del viento es algo que desconocemos. Lo podemos sentir, pero desconocemos con certeza su patrón.

No así Dios, pues El conoce con exactitud y precisión el camino del viento pues El es su creador y sustentador.

b. ¿Podríamos saber con exactitud como se forma un bebe en el vientre de su madre?

Este si es un tema delicado para muchos, en especial en estos días con la controversia del aborto.

La versión en ingles de esta porción de escritura, así como otras versiones en español y otros manuscritos, mencionan otra posible lectura para “como crecen los huesos” (como no sabes como entra entra el espíritu)

La ciencia (que el Señor nos ha dado) nos ha ayudado a entender la formación de un bebe.

Aun así, su complejidad y majestuosidad en la creación es algo sorprendente.

La realidad es que NO conocemos con exactitud como esto se logra.

El desconocer como se forma un bebe, como Dios hace esta obra milagrosa y maravillosa, y como entra el aliento de vida en esta nueva criatura, ciertamente a llevado a muchas madres a cometer aborto y a verlo como algo normal.

Al no entender que el dador de la vida y su sustentador es el Dios de la creación, muchas madres optan por asesinar una criatura que para ellas no tiene valor, pero para Dios representa una obra de Su creación.

Este maravilloso evento de creación es desconocido para el hombre, pero revela el poder de nuestro Dios. Genesis 1:26-28; 31 (RVR60)

2. Estas imágenes del Predicador nos ayudan a apreciar lo maravilloso de la creación y como Dios se manifiesta a nosotros a través de ella.

No conocemos como se mueven las olas del mar con su fuerza y poder, y aun así el océano no entra a tierra, a menos que Dios lo permita.

No conocemos como las nubes transportan el agua de vida y la depositan en diversas partes del planeta donde es mas necesaria y en el tiempo necesario.

No conocemos como las aves del campo obtienen su alimento sin ningún humano que les alimente.

No conocemos como las hojas de un árbol obtienen su verdor sin un artista que las pinte.

La Escritura nos muestra una y otra vez que Dios esta en control y que la tierra y el universo están sostenidos por el poder de Su Palabra; pero, aun así desconocemos, dudamos y desfallecemos.

Salmo 19:1–3 (RVR60)

Los cielos cuentan la gloria de Dios,

Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.

Un día emite palabra a otro día,

Y una noche a otra noche declara sabiduría.

No hay lenguaje, ni palabras,

Ni es oída su voz.

Mateo 6:28–30 (RVR60)

Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos. Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?

- Vemos las maravillas y aun así dudamos y desfallecemos porque no conocemos y no conocemos porque no ponemos toda nuestra fe y confianza en ese que es el dueño del oro y la plata, nuestro Dios y nuestro Señor Jesucristo.

- Queremos tomar acción y hacer las cosas por cuenta propia y a nuestra manera, por nuestra voluntad y conforme a nuestros deseos; y no estamos confiando en el Dios del cielo y la creación.

Estamos queriendo hacer el trabajo del Señor o tratando de ayudarle en Su obra perfecta, cuando aun ni conocemos o entendemos Su plan perfecto.

Muchas veces desconocemos nuestra verdadera relación con El, y aun así queremos saber las cosas mas profundas y ocultas de Su creación.

Nos falta oración, ayuno y ruego.

Nos falta estudio profundo de Su Palabra.

Nos falta intimidad con El, a solas y en secreto.

Nos falta conocer tanto de nuestro Dios y Señor, nos hace falta tanta intimidad y relación con El, que es muy fácil para el tentador llevarnos a desfallecer.

Desfallecemos porque desconocemos… desconocemos porque no entendemos… no entendemos cuando no nos envolvemos en una relación viva y verdadera con el Dios de la creación.

Pero aun existe esperanza. Aun en medio de lo desconocido, aun cuando desfallecemos por causa de nuestra debilidad y tal vez frágil relación con el Señor, tenemos esperanza. Aun podemos prevalecer… Pero, ¿Como lo logramos?… EN SU PODER.

II- En Su Poder Podremos Prevalecer

Es una realidad, tu y yo, por nuestra cuenta, no podremos o tendremos las herramientas necesarias para cuando estemos cayendo o desvaneciendo, para cuando vengan situaciones delicadas o para los días mas oscuros de nuestras vidas.

¿Cuantas veces hemos tratado, por nuestra cuenta, de resolver situaciones que nos agobian y hemos fallado?

¿Cuantas veces hemos intentado y hemos fracasado al tratar asuntos delicados, y aun hasta los mas simples que se nos presenta en nuestro diario vivir?

La realidad es que tu y yo no podemos solos, siempre vamos a necesitar ayuda de alguien, y quien mejor que nuestro Dios y el poder de Su fuerza; que mejor que “Confiar en Nuestro Dios Aunque No Entendamos”.

Efesios 6:10 (RVR60)

Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.

1. Como creyentes, tenemos que entender que solos no podremos prevalecer… necesitamos de Su Poder.

Volvamos al texto base para este día...

Eclesiastés 11:5 (RVR60)

Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

Salomón escribe estos proverbios con grandes imágenes, palabras que nos llevan a pensar y analizar donde nos encontramos en nuestra relación con el Señor.

-Tu y yo no sabemos, no conocemos Sus pensamientos, Sus caminos…

-Tu y yo, en muchísimas ocasiones, ignoramos la obra del Señor y el poder de Sus manos…

-Tu y yo pasamos por alto la Omnipotencia y la Omnisciencia de aquel que todo lo hace y todo lo puede...

Pero, en una relación intima y pura con el Señor podremos entender que en El es en quien podremos prevalecer y confiar, el Todopoderoso y Eterno Dios.

-Su poder nos basta, Su sabiduría nos basta, Su presencia nos basta, Su Palabra nos basta...

El es “el cual hace todas las cosas”, así todo es de El, por El y para El.

Colosenses 1:15–17 (RVR60)

El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;

-Con Su poder y Su sabiduría El sostiene toda la creación porque es de El. El es el principio y fin de la creación, quien la sostiene y providencialmente atiende.

-El es el Todopoderoso y tenemos que comprender que nada podremos hacer fuera de El. Así, como creyentes, solo podremos prevalecer si nos sostenemos en Su poder.

2. Cuando sintamos desfallecer, meditemos en Su poder y acordemos que solo en El podremos vencer.

Salomón, a través de toda su vida, ciertamente obtuvo gran poder.

Riquezas, sabiduría, esposas, terrenos, jardines, construcciones, etc. Todo lo que quiso, esto logro.

Sin embargo, olvidó refugiare en el poder del Creador y desfalleció. (1º Reyes 11:1-11)

Ciertamente, a Salomón no le fue nada bien luego de tomar tan malas decisiones por su propia cuenta.

Pensó que el solo podría, que no necesitaba la ayuda del Dios de la creación, y que aun en el tiempo en que desfallecía, el podría por su cuenta… pero no fue así.

1º Reyes 11:11 (RVR60)

Y dijo Jehová a Salomón: Por cuanto ha habido esto en ti, y no has guardado mi pacto y mis estatutos que yo te mandé, romperé de ti el reino, y lo entregaré a tu siervo.

En su vejes, Salomón medito en los acontecimientos de su vida, y al redactar este maravilloso libro de Eclesiastes, por medio de el, Dios nos deja una gran enseñanza.

Cuando Salmón se olvido del Señor y comenzó a caminar por su cuenta, Dios se lo dejo saber; solo NO podrás y te ira mal.

En el comienzo del ultimo capitulo de este libro, Salomón nos reafirma, meditando en su pasado, en quien debe estar puesta nuestra confianza, nuestra fe.

Durante todo el libro Dios nos recuerda mediante las vivencias de Salomón, que todo lo que logremos y obtengamos, fuera de Su voluntad, se convierte en vanidad que nos lleva a desfallecer porque es pesar al espíritu.

La ilustración que nos muestra Salomón en este ultimo capitulo habla por si sola…

Eclesiastés 12:1 (RVR60)

Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento;

Ciertamente, solo en el Señor y en el poder de Su fuerza es que podremos prevalecer.

Solo una vida, desde temprano, a los pies de nuestro Dios, nos podrá ayudar en los días donde no haya contentamiento.

Solo a los pies de nuestro Señor podremos levantarnos cuando hayamos desfallecido por el pesar de los días malos.

Podría aparentar que vemos frutos cuando trabajamos por nuestra cuenta, pero solo confiando en el Dios de la creación, en nuestro Señor Todopoderoso (aunque no entendamos) podremos vencer cuando nos encontremos en la oscuridad.

Entonces, El desconocer nos lleva a desfallecer… Pero en Su poder podremos prevalecer… lo que nos lleva a nuestro tercer punto:

III- Confiemos en El Aun Cuando No Logremos Entender

Miremos entonces el texto que hemos tratado hoy en su contexto como punto final y aplicación...

Eclesiastés 11:1–6 (RVR60)

Echa tu pan sobre las aguas; porque después de muchos días lo hallarás.

(2)Reparte a siete, y aun a ocho; porque no sabes el mal que vendrá sobre la tierra.

(3)Si las nubes fueren llenas de agua, sobre la tierra la derramarán; y si el árbol cayere al sur, o al norte, en el lugar que el árbol cayere, allí quedará.

(4)El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.

(5)Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

(6)Por la mañana siembra tu semilla, y a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno y lo otro es igualmente

-Ciertamente vivimos en un tiempo donde a diario vemos tantas cosas negativas, y estamos tan cargados de ellas por las noticias y los medios, que ya hasta desconocemos o dudamos de lo que en realidad sucede y esto nos lleva a desfallecer.

-Pero aun en medio de estas situaciones tan negativas que nos acontecen, si colocamos nuestras cargas en el Señor y en el poder de Su fuerza, si confiamos plenamente toda nuestra vida a El con todas nuestras dudas, desconocimientos y problemas, si El se convierte en el centro y todo de nuestras vidas, no importa lo que veamos o no veamos, en Cristo podremos prevalecer.

-En el contexto de esta porción de Escritura que estamos exponiendo hoy, Dios por medio de Salomón y sus vivencias, nos esta exhortando a confiar en El aun cuando no entendamos Su plan, Sus caminos o Sus pensamientos.

Es muy claro que Dios se quiere revelar a nuestras vidas y nos quiere mostrar esos planes maravillosos, esos caminos perfectos y esos propósitos que tienen sentido y valor.

Pero es muy difícil que esto suceda si no estamos confiando a cabalidad en nuestro Dios y en Su Omnisciencia y Omnipotencia, aun cuando no entendamos o cuando dudemos.

Cita de la Biblia de Estudio de Charles Spurgeon

“Hay grandes misterios que nunca comprenderemos. Solo Dios conoce como el alma entra en el cuerpo, o aun como se forma el cuerpo. Este conocimiento pertenece a El. No sabemos como se regeneran los pecadores. Tampoco sabemos como obra el Espíritu de Dios en la mente humana y transforma al pecador en un santo. Mi deseo de saber no es ni la cuarta parte de lo que anhelo creer y amar. Oh, si tan solo amaramos mas a Dios y confiáramos mas en El. Si así fuera, podríamos ir al cielo aunque supiéramos menos de lo que sabemos.”

Hermano, es probable que tu y yo nunca veamos el plan perfecto de Dios o lo entendamos por completo, hasta que este sea revelado a nosotros, tal vez en esta vida o en la vida eterna junto a El.

Aun así, estamos llamados a cumplir Su propósito en esta tierra, y esto comienza con aceptar todo lo que El nos regala cada mañana y a confiar en El aun cuando no entandamos ese plan o ese propósito para nuestras vidas.

Mediante una serie de Proverbios que encontramos desde el cap. 10:1 hasta el cap. 11:8, Dios nos exhorta a confiar en El, a mirarle a El, a enfocarnos en el aun cuando no entendamos el porque suceden las cosas.

A través de estos proverbios con carácter especial, Dios nos muestra esa experiencia del hombre con la vida a la luz de una relación con El.

Echa tu pan sobre las aguas; porque después de muchos días lo hallarás.

(2) Reparte a siete, y aun a ocho; porque no sabes el mal que vendrá sobre la tierra.

Muchos maestros y teólogos han dado dos interpretaciones para este verso:

La primera tiene que ver con comercio marítimo, donde se exhorta al lector de este proverbio a arriesgarse en ellos ya que la recompensa es segura.

La segunda tiene que ver con la generosidad y el socorrer a los necesitados, que a la larga traerá recompensa.

Proverbios 19:17 (RVR60)

A Jehová presta el que da al pobre,

Y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar.

Sea cual sea la interpretación de este proverbio, Dios nos esta llamando a confiar en El, nos llama a ayudar al necesitado, nos llama a invertir tiempo y dinero, nos llama darnos plenamente entendiendo que todo lo que hagas por otros o por ti tendrá una bendición en esta vida o en la futura si confiamos plenamente en EL aunque no entendamos.

2. (3) Si las nubes fueren llenas de agua, sobre la tierra la derramarán; y si el árbol cayere al sur, o al norte, en el lugar que el árbol cayere, allí quedará.

Dios nos ha provisto en sobremanera. Nos ha dado vida y vida eterna, nos de el sustento, nos provee un lugar donde descansar, nos provee transportación, nos ha dado Su Palabra con Sus promesas… El nos ha dado en sobre manera, y espera que así nosotros ayudemos a otros en necesidad.

Esto es de lo que habla este proverbio. Dios espera de nosotros una confianza plena en El, el Dios providencial que también nos ayuda a entender que El nos seguirá proveyendo, y en cambio esa provisión nosotros la podamos derramar sobre otros.

Nuestro amor por el Señor se debe ver derramado sobre otros en necesidad para que así puedan ver a ese en quien nosotros hemos confiado.

Este proverbio también nos muestra que, ademas del servicio a otros confiando en que Dios proveerá, que la dirección que tomen nuestros pasos, siendo una puesta en las manos del Señor, se mantendrá firme confiando que el Señor nos guiara y nos sostendrá aun cuando vengan piedras de tropiezo y dificultad.

3. (4) El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.

Comentario Bíblico Mundo Hispano Tomo 9: Proverbios—Cantares (12. Temas misceláneos, 10:1-11:8)

El viento hace difícil la siembra que se hacía “al voleo”, la lluvia impide la cosecha. Quien teme una u otra cosa, ni sembrará ni segará, pero este temor es, a veces, el argumento de holgazán.

Muchos temores nos arropan y nos impiden tomar decisiones que son para un bien futuro.

Como el agricultor que decide no sembrar porque hay mucho viento o mucha lluvia, así nos sucede a nosotros cuando actuamos en no tomar decisiones para nuestras vidas porque tenemos miedos a que estas no rindan frutos.

Con este proverbio, Dios nos dice que si solo nos quedamos mirando y no damos el paso en fe, confiando en El y en Su poder, nos quedaremos sin esa bendición que Dios tiene preparada para nuestras vidas.

Es necesario que demos el paso, pero este tiene que ser uno de fe, confiando en el Señor aun cuando no podamos ver.

Proverbios 22:13 (RVR60)

Dice el perezoso: El león está fuera;

Seré muerto en la calle.

El agricultor no siembra porque teme al viento y a la lluvia.

El obrero no sale en busca del sustento porque el león esta fuera y puede morir.

Pero el que confía en el Señor aunque no pueda ver o entender, confía en quien tiene la fortaleza de los siglos (Isaias 26:4)

4. (5) Como tú no sabes cuál es el camino del viento, o cómo crecen los huesos en el vientre de la mujer encinta, así ignoras la obra de Dios, el cual hace todas las cosas.

(6) Por la mañana siembra tu semilla, y a la tarde no dejes reposar tu mano; porque no sabes cuál es lo mejor, si esto o aquello, o si lo uno y lo otro es igualmente

Terminamos con nuestro texto base y una exhortación en el verso 6.

Nuevamente, se nos hace muy difícil, al menos a este servidor, entender a cabalidad como se forma el niño en el vientre de la madre, o por que camino va el viento.

Cuando nos falta la confianza y el conocimiento del Altísimo (Proverbios 9:10) es muy probable que no podamos entender, ni tan siquiera ver Sus planes, Sus propósitos, y mucho menos, Sus caminos.

Cuando ignoramos Su obra y el poder con el cual El hace todas las cosas, nuestros días serán negros, cargados de temores y dudas.

Pero cuando nuestra vida y todo nuestro ser esta centrado en Cristo Jesús y en el poder de Su fuerza seremos como David, que cuando venia el león o el oso el le echaba mano, pues confiaba en el poder del Señor aunque no entendiera cual era el propósito final de esa lucha.

En nuestro ultimo verso Dios nos da una gran exhortación a salir, a enfrentar cada día en Su poder, confiando en El aun cuando no podamos entender, que Su plan es mejor, Sus caminos son mejores y que sus pensamientos son mejores que los nuestros.

- No sabemos cuales son los planes del Señor, mucho menos conocemos sus caminos o Sus pensamientos. Aun así El nos pide que sigamos adelante confiando en El.

- Deberíamos usar la sabiduría con audacia y cuidado, con astucia pero con humildad, alegrándote de la vida, recordando que nuestros días de alegría están limitados por la certeza de la muerte.

- A pesar de nuestra ignorancia sobre la realidad y especialmente sobre lo que va a pasar, uno no debe permanecer activo. Parálisis está fuera de cuestión. Debemos movernos, y debemos movernos en Fe.

No sabemos, pero confiamos.

No entendemos, pero nos movemos.

No vemos, pero nos entregamos.

No en nuestras fuerzas, no en nuestro conocimiento, no con nuestra sabiduría, no con nuestra astucia, no por nuestra voluntad.

Todo por El, para El y en El.

El sabe que es lo mejor, El conoce los caminos y solo El nos puede llevar en victoria; pero solo si Confiamos en El Aun Cuando No Entendamos.

Conclusion:

Hermanos, ciertamente los días son duros. Enfermedades, plagas, tormentas, crimen, en fin, son días duros los que vivimos. Pero en todos ellos Dios nunca nos ha dejado solos.

No solo nos aquejan la enfermedad o el crimen, también problemas familiares, situaciones con hermanos en la fe que no piensan igual, y las crisis laborales. Pero aun en medio de estas situaciones Dios esta ahí, nunca estamos solos.

Aparece una enfermedad, pero con ella una cura, un remedio o un bálsamo para tolerar el dolor.

Nos destroza un huracán, pero a su salida vemos los rayos del sol, la promesa del arco en el cielo, la ayuda económica aun del extranjero y la mano solidaria en tiempo de perdida material o de vida.

Muere un misionero, se retira un pastor o nace el deseo de un nuevo ministerio en la iglesia, y en medio de todo esta Dios con Su plan perfecto, para llevar a Su iglesia por el camino correcto y con el pensamiento eterno que solo El nos puede brindar.

Así que, hermanos, Confiemos en el Señor Aun Cuando No Entendamos. Depositemos en El todas nuestras cargas, pensamientos y deseos. Veamos en Fe como se cumple Su plan Perfecto, como lleva a Su iglesia por el camino correcto, entendiendo que Su pensamiento no es nuestro pensamiento y que Su camino no es nuestro camino, sino uno mucho mejor para gozo pleno y esperanza viva.