El cristiano y la piedad
Sermon • Submitted
0 ratings
· 72 viewsNotes
Transcript
Introduccion
Introduccion
5 vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
En el centro de la búsqueda espiritual está una quinta cualidad, piedad, que viene de un término (eusebeia) que significa reverencia por Dios
El inicio de la vida piadosa es el poder de Dios y el conocimiento de su persona. Su desarrollo dependerá de la medida de empeño que cada cristiano ponga. Dice Pedro: Y por esto mismo, poniendo todo empeño. Es decir, que para llegar a un pleno desarrollo de la vida que hemos recibido de Dios, necesitaremos invertir tiempo, dedicación y practicar gimnasia espiritual para acrecentar nuestra vida piadosa.
6 Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;
También se podría traducir “religión verdadera”, o “adoración auténtica”, y trasmite la idea de que quien la posee honra y adora apropiadamente a Dios
16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Predicado a los gentiles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria.
En el pensamiento griego eusebeia abarcaba todos los rituales relacionados con la adoración y la lealtad ofrecidas a dioses paganos, respecto a todo lo que es divino. Los primeros cristianos santificaron las definiciones griegas de la palabra y la dirigieron hacia el único Dios verdadero y Padre del Señor Jesucristo. El apóstol Pablo instruyó a Timoteo en que tal reverencia hacia Dios es de máxima prioridad a causa de su valor eterno. Pablo escribió: “La piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera
7 Desecha las fábulas profanas y de viejas. Ejercítate para la piedad;8 porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera.
La devocion hacia Dios es un ingrediente indispensable para la vida del cristiano.