¡Mesías! - ¡Nace la paz!
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Social
Introducción
Introducción
Bienvenido y buenos días...
El capítulo 2 de Lucas incluye el canto de los ángeles, entonado a los pastores en los campos...
8 En la misma región había pastores que estaban en el campo, cuidando sus rebaños durante las vigilias de la noche.
9 Y un ángel del Señor se les presentó, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor.
10 Pero el ángel les dijo: «No teman, porque les traigo buenas nuevas de gran gozo que serán para todo el pueblo;
11 porque les ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Señor.
12 »Esto les servirá de señal: hallarán a un Niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre»
13 De repente apareció con el ángel una multitud de los ejércitos celestiales, alabando a Dios y diciendo:
14 «Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace».
15 Cuando los ángeles se fueron al cielo, los pastores se decían unos a otros: «Vayamos, pues, hasta Belén y veamos esto que ha sucedido, que el Señor nos ha dado a saber»
[orar]
I. Paz en la Tierra
I. Paz en la Tierra
Mientras contemplaba el nacimiento de Jesucristo y la razón por la que vino a la tierra, empecé a pensar en el nuevo año que se aproxima. La llegada de un nuevo año llena a la gente de inquietud en tiempos en los que hemos experimentado pandemias mundiales, fallos en la cadena de suministro, guerras y rumores de guerra, así como una inflación galopante. La gente tiene miedo porque no sabe qué desafíos le deparará el año 2023.
Sin embargo, aún nos queda una esperanza viva cuando llegue la Navidad...
14 «Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz entre los hombres en quienes Él se complace».
Al menos a la mayoría de nosotros nos pasa. Algunos de nosotros luchamos más en esta época del año que en cualquier otra debido a la pérdida de seres queridos, cambios irrevocables y trastornos generales en nuestra cómoda forma de vida.
Mientras contemplaba este versículo, no pude evitar pensar en cómo no estamos a la altura del sentimiento de este pasaje...
...paz en la tierra...
...la incongruencia me impactó.
No vivimos en un mundo que parezca haber aprendido nada en absoluto sobre la paz.
El español dice...
…en la tierra paz entre los hombres...
La Reina Valera dice...
...en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!
Tenemos el mismo problema con las traducciones en inglés.
Hay cierta dificultad aquí en la forma en que se traduce este versículo... Eso se debe a que las palabras de esta canción celestial son algo difíciles de traducir al espanol actual. Ya llegaré a eso, pero mi mente empezó a contemplar la idea de paz en la tierra.
No parece que hayamos encontrado esa paz a la que cantaban los ángeles aquella noche de hace tanto tiempo. A pesar de todo lo que se habla sobre la paz y el amor en Navidad, nuestro mundo sufre una falta de paz que la Navidad no parece poder curar...
Cuando pensamos en Lucas 2:14, nuestra cultura colectiva dirige nuestra mente a pensar en la paz mundial. Por eso vemos presidentes que intentan traer la paz a Oriente Medio. Pero también vemos en la Biblia que no habrá paz mundial hasta el regreso de Jesús. La paz no es lo que el niño acostado en el pesebre trajo al mundo en aquella noche silenciosa de hace tanto tiempo.... o al menos no en la superficie. Pero sigamos buscando la paz.
La fe en Dios nos trae la paz en los momentos difíciles. Me vienen a la memoria los acontecimientos más trágicos de mi propia vida y de la vida de otras personas cercanas a mí. Los que tienen fe en Dios acuden a Él en los momentos de mayor angustia.
Todos pasamos por tragedias en la vida. Esto forma parte de vivir en un mundo caído. Perdemos a seres queridos. Experimentamos la muerte. Nosotros (algunos de nosotros) hemos experimentado la pérdida del amor o hemos pasado por el divorcio de padres o cónyuges.
Tengo una tía que en el espacio de un año perdió a su marido de cáncer, perdió a un yerno de cáncer, perdió a su hija de un ataque al corazón dejando atrás a su cónyuge y 2 niños pequeños. Por último, mi tía y su hija sobrevivieron a la pérdida total de su casa a causa de un incendio. Pero mi tía y su familia tienen una gran fe en Dios y acudieron a Él en busca de consuelo y paz.
Cuando miramos a los manuscritos griegos de Lucas 2:14, la frase original es un poco críptica y no se puede traducir literalmente al inglés o al español...
Griego: "Y en la tierra paz entre los hombres complacidos"
Muchos estudiosos de la Biblia toman la palabra "paz" como una referencia al Príncipe de la Paz, el niño nacido, el Cristo, el Mesías largamente esperado de Israel...
El teólogo del Nuevo Testamento, John Noland, habla de este momento como un punto de partida para la paz. Noland traduce esta frase "en la tierra hay paz entre el pueblo al que Dios ha favorecido". [Nolland, John (1989). Lucas 1:1-9:20 (Vol. 35A, p. 97). Dallas: Word, Incorporated].
Esa frase en la NASB se traduce como "entre los hombres con quienes Él se complace" ... No estoy de acuerdo con esa traducción. Aunque ciertamente es un significado posible, no creo que de ninguna manera podamos determinar que Dios envió a Su único Hijo, Jesucristo, a vivir en la tierra como humano y morir en una cruz porque estaba complacido con nosotros o incluso porque estaba complacido con Israel.
Por el contrario, Él envió a Jesús porque estábamos en una situación desesperada y necesitábamos un redentor más que nunca. Dios envió al Príncipe de la Paz (Isaías 9:6) como un acto de buena voluntad hacia el hombre. Envió a Su Hijo para salvarnos porque no podíamos salvarnos a nosotros mismos y estábamos completamente fuera de toda esperanza.
Aquel niño que nació en la tierra hace tanto tiempo no nació para derrocar gobiernos durante su vida. Sin embargo, fue una semilla de paz plantada en la tierra y en los corazones de los hombres. Porque en ese niño depositamos nuestra esperanza del cielo y nuestra esperanza de una tierra nueva.
En Jesús nació la paz. Pero no necesariamente la paz como cese de guerras y conflictos... al menos no todavía.
La paz que trae Jesús es un principio de paz con Dios. Es un "punto de partida".
Sabemos por las escrituras que Dios desea una relación íntima con su creación. Pero esa intimidad ha sido rechazada y despreciada por el hombre desde que Adán y Eva cayeron en el pecado.
Dios envió a Jesús a la tierra con el fin de proporcionar una manera de arreglar esa relación con la humanidad. Al enviar a Jesús, Dios está ofreciendo la rama de olivo de la paz a la humanidad y depende de la humanidad aceptarla o rechazar la oferta de paz.
Cristo es lo único que puede reconciliar nuestro pecado con Dios.
Sin embargo, algunos de nosotros que nos llamamos cristianos podemos descubrir que a veces nos falta la paz en nuestras vidas.
II. Claves para la paz personal
II. Claves para la paz personal
Cuando pienso en la paz personal, acudo inmediatamente a Filipenses 4:4-9. Filipenses es una carta escrita por Pablo a la iglesia primitiva de Filipos. La iglesia estaba sufriendo en medio de una gran persecución y sufrimiento. Al principio de la carta, Pablo advierte a los cristianos de Filipos que permanezcan firmes en su fe. La imagen que invoca es que son como una manada de caballos salvajes, dispuestos a desbocarse a la menor provocación.
Pablo da su último consejo en esta carta en el capítulo 4...
4 Regocíjense en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocíjense!
5 La bondad de ustedes sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
6 Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios.
7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.
8 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto mediten.
9 Lo que también han aprendido y recibido y oído y visto en mí, esto practiquen, y el Dios de paz estará con ustedes.
Considero esta sección como un consejo personal de Pablo a los cristianos de Filipos sobre cómo mantener la paz en el Señor mientras siguen luchando. Y creo que los cristianos de hoy en día pueden aprender de ella y aplicarla a sus propias vidas, mientras luchan por vivir en este mundo difícil.
1. Regocíjense en el Señor - v 4
1. Regocíjense en el Señor - v 4
4 Regocíjense en el Señor siempre. Otra vez lo diré: ¡Regocíjense!
La carta de Pablo a los filipenses late a ritmo de regocijo. Habla de ello una y otra vez a lo largo de la carta.
¿Qué es gozo?
Otra vez la palabra "alegría". Ya hablamos de ella al principio de nuestra serie sobre el Fruto del Espíritu.
regocijarse - xαίρετε - chairete
Regocijarse aquí conlleva un sentimiento de gozo, alegría y felicidad. El regocijo es algo que usted puede sentir internamente pero también es aparente a otros.
Al alegrarse "en el Señor" se puede decir que elegimos tener alegría por el Señor y porque estamos en el Señor (y el Señor habita en nosotros).
Pablo repite su mandato de alegrarse (16 veces) como una forma de reforzar y enfatizar su importancia.
Pablo tenía muchas razones para dejar de regocijarse. Lo más probable es que estuviera bajo arresto domiciliario en la época en que se escribió esta epístola. Sin duda, sus viajes estaban restringidos y no podía reunirse personalmente con la iglesia de Filipos.
Sin embargo, Pablo había llegado a la conclusión de que no hay situación en la vida que esté fuera del alcance de Dios. Creía que Dios tenía el control y estaba directamente implicado en la vida de los santos.
Ahí es donde la mayoría de nosotros fallamos a la hora de mantener nuestra alegría en el Señor. No podemos estar realmente seguros en nuestro interior de que Dios nos cubre las espaldas. Así que dejamos que la alegría se nos escape de las manos.
La alegría es una característica de la vida cristiana (Fruto del Espíritu-Gal 5:22): Amor, Alegría, Paz, Paciencia, Bondad, Mansedumbre, Autocontrol
VERDAD Si usted no tiene gozo en su vida entonces algo esta mal que necesita ser atendido.
2. Sea Gentil - v 5
2. Sea Gentil - v 5
5 La bondad de ustedes sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca.
Esta palabra traducida aquí como "gentileza" (o "amabilidad" en otras traducciones) es ἐπιεικὲς - epi-ay-kays - no hay una buena traducción al español para esta palabra, pero podemos captar su sentido.
Nuestro mejor sentido de la palabra es: gentil, moderado, indulgente, razonable, tolerante, considerado, complaciente, paciente, justo, amable, adecuado, complaciente, generoso. [whew]
Si usáramos todas estas palabras juntas para describir a una persona, entenderíamos lo que significa "Que tu espíritu amable sea conocido por todos los hombres".
Parece que hoy en día estamos constantemente buscando pelea y haciendo la guerra. Especialmente en las redes sociales, pero también en conversaciones y situaciones cotidianas, parece que siempre tenemos la necesidad de
corregir a los demás haciéndoles saber en qué se equivocan y en qué tenemos razón (¿alguien quiere decir nazis de la gramática?)
discutir incesantemente sobre opiniones políticas y sociales
Abraham Lincoln dijo: "Cuando discutas con un tonto, asegúrate de que el oponente no está haciendo exactamente lo mismo".
La palabra ἐπιεικὲς (epee-ay-kays) conlleva un elemento de desinterés. Una persona amable no insiste en sus propios derechos. El corazón del cristiano actúa en contra de la práctica común.
Creo que cuando carecemos de mansedumbre y dulzura, tenemos tendencia a ser más duros con los demás y más duros con nosotros mismos. Esta dureza con los demás nos lleva hacia una actitud de arrogancia y desbarata muchos de los Frutos del Espíritu que hay en nosotros.
3. No estés ansioso, pero ora por todo - v 6
3. No estés ansioso, pero ora por todo - v 6
6 Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios.
No te preocupes - v 6a
La ansiedad no es lo mismo que la depresión, pero está estrechamente relacionada con ella.
Nerviosismo
Irritabilidad
Dificultad para dormir
Problemas para comer (demasiado, muy poco, problemas estomacales)
Dificultad para concentrarse
Patrones de pensamiento negativos
Vivimos en un mundo acelerado y móvil que consumimos vorazmente a un ritmo cada vez mayor. A menudo asumimos más y más estrés sin tomarnos el tiempo necesario para lidiar adecuadamente con ese estrés y descomprimir nuestros espíritus siempre tensos.
Jesús habla de esto en Mateo 11:28-30
28 »Vengan a Mí, todos los que están cansados y cargados, y Yo los haré descansar.
29 »Tomen Mi yugo sobre ustedes y aprendan de Mí, que Yo soy manso y humilde de corazón, y hallarán descanso para sus almas.
30 »Porque Mi yugo es fácil y Mi carga ligera».
Combata la ansiedad con la oración - v 6b
6 Don’t worry about anything, but in everything, through prayer and petition with thanksgiving, present your requests to God.
Pablo nos dice exactamente lo que necesitamos para frenar la ansiedad en nuestras vidas: La paz divina de Dios (la que sobrepasa todo entendimiento).
No es algo que podamos conseguir con nuestra propia fuerza de voluntad.
No es una situación que dependa de algún cambio de circunstancias para conseguirla. (Aunque eso es exactamente lo que le pedimos a Dios).
La paz de Dios es algo que sólo Él puede darnos.
Y podemos tener esa paz simplemente conectándonos con Dios y relacionándonos con Él y entregándole nuestras peticiones una por una. Lo hacemos con la oración.
La oración es el mejor antídoto que existe contra la preocupación.
La oración centra nuestros pensamientos en Dios y no en el tema de nuestra ansiedad.
La oración nos conecta con los pensamientos de Dios.
La oración puede realmente corregir tu pensamiento apestoso y recordarte que pienses en las cosas como lo hace Dios.
La oración puede restaurar la paz en tiempos de preocupación.
4. Deja que la paz guarde tu corazón - v 7
4. Deja que la paz guarde tu corazón - v 7
7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.
En el Antiguo Testamento se llama:
OT: שָׁלוֹם - shalom - plenitud, solidez, bienestar
Traducido como εἰρήνη - eirēnē en la Septuaginta LXX (la versión griega del Antiguo Testamento).
Esta paz de Dios es la misma paz que nos trajo el niño en el pesebre aquella noche silenciosa.
En el Nuevo Testamento se nos presenta una nueva paz mesiánica, que se refiere principalmente a una relación reconciliada con Dios a través del Mesías, Jesucristo.
Permíteme decir primero que si no eres salvo por la obra de gracia que Jesucristo completó en la cruz, entonces nunca podrás experimentar la Paz de Dios. Puedes tener paz... puedes experimentar un día pacífico haciendo senderismo en el bosque o pescando a lo largo de la costa. Pero no puedes tener la profunda paz de Dios que solo viene a traves de Cristo y es otorgada por una relacion salvadora con Cristo.
La paz de Dios - v 7
La paz de Dios - v 7
... sólo viene de Dios a través de Cristo
... sobrepasa todo entendimiento
... guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús
1. Sobrepasa todo entendimiento - 7a
1. Sobrepasa todo entendimiento - 7a
Esta frase ("y la paz de Dios es mayor que toda la mente") en pocas palabras, nosotros los humanos nunca podemos comprender plenamente la paz de Dios. Pero ciertamente sentimos los efectos de la falta de la paz de Dios en nuestras vidas.
2. La paz de Dios guarda tu corazón - v 7b
2. La paz de Dios guarda tu corazón - v 7b
7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.
Dios pone una fortaleza de paz alrededor de nuestros corazones para guardarla como un tesoro. Pero el enemigo asalta este muro todos los días para robarnos la paz.
Constantemente tenemos que ponernos en guardia contra los ataques del enemigo.
3. La Paz de Dios Guarda Tu Mente - v 7c
3. La Paz de Dios Guarda Tu Mente - v 7c
7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará sus corazones y sus mentes en Cristo Jesús.
De hecho, la Biblia nos promete que tiene la capacidad de guardar no sólo nuestro corazón (nuestras emociones), sino también nuestros pensamientos.
Vemos un ejemplo perfecto de la paz de Dios guardando la mente de Jesús en el desierto (Mateo 4:1-11; Lucas 4:1-13) cuando respondió a las tentaciones del enemigo con una respuesta de las Escrituras.
Podemos desempeñar un papel activo en la protección tanto de nuestro corazón como de nuestra mente estudiando y comprendiendo la Palabra de Dios y permaneciendo "en Cristo Jesús".
Pablo lo dijo de otra manera en 2 Corintios 10:5:
5 destruyendo especulaciones y todo razonamiento altivo que se levanta contra el conocimiento de Dios, y poniendo todo pensamiento en cautiverio a la obediencia de Cristo,
He aquí una pequeña fórmula que utilizo para restablecer la paz cuando se ve alterada:
Detecta tus patrones de pensamiento negativo, reconócelos y date cuenta de que estás siendo negativo.
Redirige tus pensamientos y sustitúyelos por otros positivos. (más información a continuación)
Orar por la Paz de Dios - la oración tiene el poder de centrar tu mente en las cosas de Dios. Redirige tus patrones de pensamiento.
Esta fórmula literalmente recableará las neuronas de tu cerebro y te ayudará a formar formas más positivas y productivas de pensar sobre la vida.
5. Piensa en estas cosas - v 8
5. Piensa en estas cosas - v 8
8 Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo digno, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo honorable, si hay alguna virtud o algo que merece elogio, en esto mediten.
Ejercitar la disciplina centrando tu mente en cosas buenas en lugar de dejarla correr hacia los patrones de pensamiento negativos que todos tenemos por defecto.
Estas son las cosas con las que llenas tu mente después de haber tomado tus pensamientos cautivos:
Mantén tus pensamientos en...
lo que es verdad
lo que es honorable
lo que es justo
lo que es puro
lo que es bello
lo bueno
lo excelente
qué valen los elogios
Cuando pierdas de vista estas cosas buenas, tu mente volverá a la ansiedad y la preocupación que dominan tus pensamientos.
Puedes pensar en tu mente como una taza en este caso. Si sacas las cosas preocupantes, tienes que llenar la taza con cosas buenas para evitar que las cosas preocupantes vuelvan a inundarte como el agua.
6. La práctica hace la paz - v 9
6. La práctica hace la paz - v 9
9 Do what you have learned and received and heard from me, and seen in me, and the God of peace will be with you.
Y finalmente debemos practicar estas cosas que Pablo nos enseña para mantener la paz de Dios.
No podemos esperar hacerlo bien la primera vez. Al igual que hacer dieta y mantener a tu familia dentro de un presupuesto, esto tomara algo de ensayo y error para hacerlo bien.
Esto se debe a que somos criaturas de hábitos. Una vez que desarrollamos el mal hábito de dudar y estar ansiosos, es un patrón difícil de romper.
Requerirá disciplina y algunos fracasos. Pero cada vez que caemos, ¿qué debemos hacer?
Sólo tendremos éxito si somos capaces de volver a levantarnos.
III. Mi paz les doy
III. Mi paz les doy
Finalmente tenemos una promesa de Jesucristo.
27 »La paz les dejo, Mi paz les doy; no se la doy a ustedes como el mundo la da. No se turbe su corazón ni tenga miedo.
Conclusión
Conclusión
Regocíjense en el Señor
Sé Gentil
No estés ansioso, pero ora por todo
Deja que la paz guarde tu corazón
Piensa en estas cosas (las cosas buenas y bonitas)
La práctica hace la paz
El nacimiento de Jesucristo no trajo la paz tal como el mundo la concibe, como el cese de los conflictos y las luchas internacionales, sino que nos trajo la paz con Dios.
Los tiempos pueden ser turbulentos, y puedo prometerte que seguirán siéndolo. Sin embargo, experimentamos el favor de Dios a través de nuestra salvación en Jesucristo y la paz que nos trae al buscar continuamente vivir