Mas que una canción, un estilo de vida.

Introducción:

La alabanza a nuestro Dios es algo que ha causado mucho revuelo, constantemente se está pensando en cual debería ser la manera correcta de alabar al Señor; en ocasiones se ha pensado que un estilo de música es el verdadero y único, por ejemplo, los cantos gregorianos fueron ampliamente utilizados en los cultos de los siglos I al XV, estos cantos tenian por norma basarse en un texto biblico (de manera literal), no se permitia instrumentos musicales y estaba prohibido impostanciones en la voz o algo que distrajera de la liturgia. Desde el siglo V se introdujo el organo como el instrumento liturgico, no fue si no hasta la epoca del renacimiento (siglo XVI) que se decidió utilizar otros instrumentos musicales, es hasta principios del siglo XIX que la música en los cultos se diversificó, particularmente con la liturgia de la iglesia afroamericana y finalmente la música como la conocemos hoy en día en las iglesias de nuestro alrededor.

Desarrollo:

Este salmo y el 112 probablemente se cantaban de la mano, el salmo 111 alaba a Dios y el salmo 112 reconoce la dicha del hombre que teme a Dios, de tal manera que ya podemos irnos haciendo una idea de lo que el Salmista quiere decirnos respecto a la honra y la alabanza al Señor. Este tema, el de la honra es un tema recurrente en la biblia, por una parte vemos a los escritores sagrados pidiendo la honra para Dios, por ejemplo en Isaiah 26:13 “Señor y Dios nuestro, otros señores nos han gobernado, pero sólo a tu nombre damos honra.” notamos al profeta reconociendo que aunque los reyes le piden la honra para si mismos él y el pueblo se han mantenido fieles, pero por otro lado vemos al Señor preguntando por su honra y denunciando a los que no le han honrado como es el caso del mismo libro de Isaiah 29:13 “El Señor dice: «Este pueblo me alaba con la boca y me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. Su adoración no es más que un mandato enseñado por hombres.” o en Malachi 2:2 “Si no me hacen caso ni se deciden a honrar mi nombre—dice el Señor Todopoderoso—, les enviaré una maldición, y maldeciré sus bendiciones. Ya las he maldecido, porque ustedes no se han decidido a honrarme.” El Señor especificamente decide traer maldicion al pueblo si no le honran. De tal manera que hay una constante lucha entre honrar o no el nombre del Señor.

En este Salmos vamos a ver al menos 3 razones por las cuales adorar al Señor

Por sus obras (versiculo 3)

Por su provisión (versiculo 5)

Por su fidelidad (versiculo 6)

Algunos de nosotros pensariamos que no hay necesidad de que Dios haga algo, aún asi nosotros le adoraremos porque Él es Dios y eso es suficiente, incluso esta idea tiene arraigo en algunos predicadores y no creo que estén equivocados, pero la Biblia nos da la oportunidad de explorar algunas razones para adorar a Dios, sobre todo este Salmo en donde el corazón y la mente están conectadas, las razones para adorar al Señor son importantes, si el primer caso fuese del todo cierto entonces nunca podriamos comprobar si en verdad amamos a Dios o solo le tenemos miedo y esto vendría a contradecir algunas afirmaciones en donde se dice explicitamente que Dios busca que le amemos.

En primer lugar diremos que para el Salmista el lugar especial para alabar al Señor (aunque sabemos que Pablo nos dice que lo hagamos en todo tiempo) es en la compañia de los rectos, este adorador nos invita a hacerlo de todo corazón ¿qué podría significar esto? Del corazon nacen los sentimientos mas nobles, cuando estamos alegres o enamorados incluso decimos que se nos sale el corazón del pecho, por ejemplo en Luke 10:21“En aquel momento Jesús, lleno de alegría por el Espíritu Santo, dijo: «Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque habiendo escondido estas cosas de los sabios e instruidos, se las has revelado a los que son como niños. Sí, Padre, porque esa fue tu buena voluntad.” vemos al Señor alegrarse e inmediatamente alabar al Padre, es decir, cuando alabamos no es porque somos grandes adoradores o estamos demasiado inspirados mas bien lo hacemos por inspiración y dirección del Espiritu Santo, por eso es importante reconocer que en la Iglesia, la comunidad de fe en donde el Espiritu Santo se mueve, ahi es donde nosotros podemos alabar a Dios con todo el corazón.

Segundo: Cualquiera puede ver las obras de Dios, el amanecer, el respirar, la salud, sin embargo el Salmista dice que hay algo que nos hace diferentes y es que nosotros “las estudiamos”. En las maravillas de Dios podemos ver su justicia, su bonda y su compasión. Una persona que le da al Señor su verdadero valor irremediablemente va a reconocer todo lo que hace en su justa medida, para el salmista las obras del Señor son grandes, gloriosas y majestuosas, a diferencia de los demás, en nuestros corazones debe haber el recuerdo de lo que Dios ha hecho, este recuerdo en sus justas dimensiones nos permite reconocer y decir como el salmista ¡El Señor es clemente y compasivo! La naturaleza de Dios dice que es inmutable por los siglos de los siglos, es decir no cambia y esto para nosotros es una gran noticia, el Señor no se comporta como nosotros que nos movemos de acuerdo a nuestras emociones o de acuerdo a nuestras conveniencias, el Señor se mantiene fiel y recto como lo establece el versiculo 8 y por eso todo lo que Él hace tiene la misma naturales, fiel y recta lo cual nos da a nosotros la certeza de poder confiarle y sobre todo de llenarnos de alegría porque nuestra confianza está segura.

Tercero: El Señor es fiel y provisor, ha establecido un pacto con su pueblo y como veiamos anteriormente su naturaleza es inmutable, el salmista recuerda que el Señor los alimentó y que permitió que el pueblo tomará su lugar en la tierra prometida, sin embargo en el versiculo 9 nos dice que “establece su pacto para siempre”; el apostol Pablo nos recuerda esto en Romans 8:35–37 “¿Quién nos apartará del amor de Cristo? ¿La tribulación, o la angustia, la persecución, el hambre, la indigencia, el peligro, o la violencia? Así está escrito: «Por tu causa siempre nos llevan a la muerte; ¡nos tratan como a ovejas para el matadero!» Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.” El está seguro que no hay nada que pueda apartarnos ya del pacto de Dios con su pueblo, ese pacto que se ha sellado para siempre (como lo dice el versiculo 9) ha sido sellado con la vida de Cristo quien nos ha rescatado pagando un precio que fue el hecho de tomar forma humana y morir en la cruz, por esto hermanos, nosotros no deberiamos dudar de quien es digno de alabanza, filipenses 2 es uno de los himnos mas antiguos que cantaba la iglesia primitiva y no es de extrañar que sea un himno que hable de Jesucristo y su obra encarnada, por lo tanto, si todavía nos quedaba alguna duda el dia de hoy de porque es bueno alabar al Señor, este último versiculo nos dice que el pacto del Señor es inquebrantable de tal manera que como dice aqui “su nombre es santo e imponente” tal y como lo describe el himno de filipenses 2, es el Nombre sobre todo nombre.

Conclusión:

La alabanza no es solo con el corazón tambien lo hacemos con la mente, este salmo termina diciendo que el el principio de la sabiduria, es decir aunque nos emocionamos y podemos identificarnos con algun estilo de adoración, tambien es importante a la luz de este pasaje que reconozcamos que los cantos y todo el sistema de culto son esteriles si no hay temor y reconocimiento de que los juicios del Señor son dignos de ser cumplidos. Uno de los errores mas frecuentes en el creyente moderno es pensar en el Señor como una deidad lejana que solo intenta interactuar con nosotros a través del castigo y recompensa, este Salmo nos recuerda que Él primero se acerca a nosotros, nos sustenta, nos es fiel y su pacto es para siempre, necesitamos recordar al Señor; este es nuestro gran mal, tenemos una memoria de teflón, por algo el Señor le dijo al pueblo “Y harás esto con tus hijos” de tal manera que ellos fueran capaces de traer a la memoria lo que Dios habia hecho en el pasado, Deuteronomy 31:21 “Y cuando les sobrevengan muchos desastres y adversidades, este cántico servirá de testimonio contra ellos, porque sus descendientes lo recordarán y lo cantarán. Yo sé lo que mi pueblo piensa hacer, aun antes de introducirlo en el territorio que juré darle.»” nos deja ver que la alabanza es un instrumento que el Señor ha usado para mantener una relacion con su pueblo y mantener siempre fresca la memoria de quienes le adoran.

Llamado:

¿A qué nos confronta el pasaje de hoy?

1.- Según Mack Wayne, el temor de Dios es la respuesta inevitable de un entendimiento creciente y bíblico de, y una relación con, el verdadero y viviente Dios quien ha sido revelado por Jesucristo. A diferencia del miedo, el temor a Dios nos obliga a rendirnos en perfecta adoración al Señor.

2.- La adoración sin intelecto es pura emoción, el intelecto sin corazón es pura vanidad.

3.- Nosotros estamos de paso en este mundo, sin embargo el Señor no ha cambiado nada por los siglos de los siglos, de la misma manera en que se reveló a nuestros antepasados (y le adoraban) lo quiere hacer hoy contigo y conmigo.

4.- Quien adora a Dios adora menos a su carne, la diferencia entre adorar a Dios y adorarnos a nosotros mismos radica en que de nosotros mismos no podemos decir que hemos hecho obras glorias o majestuosas y tampoco podemos decir que la obra de nuestras manos ha sido fiel y justa, adorar a Dios mantendrá nuestra vida en perfecta sintonia con su voluntad.

5.-Dios se revela a nosotros en forma de un pacto (sellado por medio de Cristo) y no por medio de un sistema de castigo y recompensa, la libertad que hay en poder saber esto, hará que nuestros corazones puedan amarle no solo con la mente si no tambien con el corazón.

6.- La adoración es un sistema comunitario, no podemos adorar al Señor si nuestra vida personal está en enemistad con los hermanos a los que Dios tambien ha salvado y con quien Dios tambien ha fijado un pacto.